lunes, 9 de enero de 2023

Las brujas de Cachiche

En el imaginario popular, las brujas son descritas como ancianas horribles que hacen daño al prójimo con sus brujerías, llevándose a los niños.
Por supuesto que esta imagen no es correcta, ya que muchas de las mujeres que practican la magia son mujeres curanderas que usan sus conocimientos más bien para sanar.
Sin embargo, a veces, esta idea en torno a las brujas sí se llega a dar tal y como se piensa.
Ejemplos tenemos en las brujas mexicanas, ancianas que valiéndose de la brujería se convierten en zopilotes y bolas de fuego, volando por entre los cerros y posándose en árboles de pirul, acechando, en busca de bebés y niños no bautizados, a quien chuparles la sangre, aliméntandose como vampiros infernales.
Ya habrá tiempo de tocar esa temática que todo buen mexicano conoce muy bien.
Ahora, nos enfocaremos hacia Sudamérica, específicamente en Perú.
Este país, colector de tradiciones de pueblos milenarios como los moches, los aimaras y los quechuas, por decir unos cuantos pueblos, obligatoriamente también ostenta creencias sobre las brujas.

Hay una comunidad al sur del Perú, en el departamento de Ica, que ha cobrado notoriedad por el tema de la brujería, Cachiche, el cual es conocido como el pueblo de las brujas.

Investigaciones Ocultas les comparte este reportaje sobre las brujas de Cachiche.



La brujería en el Perú siempre existió.
En el Perú prehispánico, existían muchas creencias sobrenaturales, las cuales trascendieron hasta nuestros días.
En la costa norte destacan los chamanes que toman San Pedro y hacen sus mesadas, especialmente en Huancabamba, aunque la ruta de la brujería también se extiende a Chiclayo, Trujillo y Chimbote.
Y el mundo andino y el amazónico también conserva su propia parafernalia mágica; el primero usando fetos de llamas, mientras que el segundo usan cabezas de caimanes, respectivamente.

El pueblo de Cachiche, en Ica, comenzó a ser conocido como un pueblo de brujas desde la época colonial.
Pero no vaya a pensar que Cachiche era un pueblo en el que sus pobladores eran brujas. 
No.
Recuerde que aquellos eran tiempos peligrosos por la presencia de la Santa Inquisición.
Cachiche, por el contrario, era el lugar de reunión de las brujas de todos los rincones de Ica.
Venían brujas de distritos como Salas, Guadalupe, La Angostura, Parcona, Los Aquijes, etc., quienes se reunían en aquelarres nocturnos, celebrados en los cerros circundantes.
La actividad brujeril se celebraba en secreto, siendo que muchas de esas mujeres asistían a misa devotamente, y sin embargo, por las noches, se dedicaban a la brujería.
Debían ser muy cautelosas si no querían levantar sospechas ante el Santo Oficio.

Ya en la época de la República, la brujería aumentó. Esto se debe a que la santa Inquisición fue abolida en el Perú, por lo que las brujas podían actuar sin miedo a ser castigadas.
Algunas mujeres fueron reticentes a que sus vecinos se enteraran que eran brujas, más que nada, por la presión social, ya que la sociedad vivía bajo valores católicos.
Sin embargo, a partir del siglo XX, las brujas saldrán del anonimato y comenzaron a hacer público su dote mágica.
Dejaron de lado el tema de los conciliábulos nocturnos en presencia de Satán y comenzaron a asentarse en en pueblo, prestando sus servicios brujeriles.
El siglo XX vería una oposición de valores en aquella sociedad: las personas eran muy católicas, pero en secreto acudían a estas brujas para hacer amarres, trabajos de brujería, daños y otras cosas.

Según la leyenda local, una de las brujas más famosas de Cachiche fue Julia Hernández Pecho, Viuda de Díaz.
Según cuentan, ella vivió toda su vida curando las enfermedades de sus vecinos, o haciendo amarres amorosos.
Era conocida por haber curado el tartamudeo de un adolescente de entre 14-15 años llamado Fernando León de Vivero.
Este muchacho, quien tenía problemas para articular frases completas, llegó a manos de la bruja, quien lo curó, y además le auguró que va a llegar a ser un gran profesional.
Años después, Fernando León de Vivero se convirtió en un gran político, ocupando cinco veces la presidencia de la Cámara de Diputados de Ica y también se convirtió en congresista de la República.
Muchos años después, don Fernando regresó a Cachiche.
Queriendo mostrar su gratitud con doña Julia, mandó levantar un monumento en honor a la bruja.
Era una estatua en forma de mujer con las manos estiradas hacia arriba en forma de V con un búho y una calavera a cada lado, tallado en un solo árbol de huarango, el cual, hoy en día, se puede visitar.

Pero esta mujer saltaría a la palestra en toda Ica, cuando en 1987, a la edad de 106 años, en su lecho de muerte, esta famosa bruja profetizó que cuando apareciera la séptima cabeza de una palmera, la cual crecía torcida en medio de la ciudad, casi en el mismo lugar en donde está su estatua, Ica sería aniquilada, hundiéndose para siempre.

En enero de 1998, el río Ica se desbordó e Ica quedó bajo sus aguas. Miles de personas resultaron damnificadas por aquel desborde.
La gente asegura que en ese año no se cortó ni se quemó la séptima cabeza de la palmera.
Desde esa fecha, los iqueños no han dejado de cortarla.


En la actualidad, las temidas brujas han desaparecido; sin embargo, en los últimos años, Cachiche ha experimentado un crecimiento turístico debido a la leyenda de las brujas, siendo la plaza con la estatua de la bruja y la palmera de las 7 cabezas los sitios más visitados.
Este turismo paranormal y esotérico ha conllevado a que muchos quieran reforzar ese legado mágico.
Muchas personas del lugar se han autodenominado hechiceros y santeros, qafirmando haber heredado los poderes de Doña Julia.
Incluso, las personas del lugar han diseñado un espacio llamado "El parque de las brujas de Cachiche", un parque temático en el que se cuentan las referidas plaza con la estatua de la bruja y la palmera, así como se han incorporado nuevos elementos, tales como estatuas de brujas, gárgolas, etc.

Actualmente, al llegar a Cachiche también se puede encontrar un “Centro Metafísico”, creado aprovechando el boom turístico que ha habido en Cachiche.
En dicho centro metafísico se puede encontrar una pirámide hecha de adobe, la cual se está ubicada casi en una esquina del local.
Las guías suelen explicar cuál es su función y como la gente acude a Cachiche de todas partes del mundo para alejar la mala vibra y limpiar su aura.

Se puede apreciar que la pirámide tiene en la punta un cuarzo que sirve para sacar las malas energías del alma de las personas y así a través de rezos y palabras, limpiarlas, alejando la envidia, la mala suerte que aveces se apodera de la gente. Si ingresas a esta pirámide, podrás sentir una gran cantidad de energía; esta es una densa habitación, hay una gran banca, inciensos, una olla con varias hierbas y velas, donde cada elemento, según la lo visto, es de suma importancia para los rituales que allí se realizan.
Según lo visto, las personas no solo acuden a este sitio para tratar los males, si no también a relajarse, ya que los inciensos, velas, y hierbas, ayudan a purificar el alma , logrando que la gente entre en un estado de tranquilidad y meditación.

miércoles, 7 de diciembre de 2022

Casas embrujadas en Cusco: Historias de terror

Al hablar del tópico de casas embrujadas, se asume que sólo en la ciudad hay casas con actividad paranormal, cuando en realidad, hay casas embrujadas tanto en la ciudad, como en el campo.
Una de las ciudades más emblemáticas del Perú es la ciudad del Cusco.
Y si hablamos de esta ciudad es porque tiene casas embrujadas.
La casa embrujada más famosa de la urbe cusqueña es la autodenominada casa maldita de la calle Saphy.
Pero no es la única casa.
Investigaciones Ocultas les compartirá unos relatos de terror compartidos por personas que, en determinadas circunstancias, vivieron anécdotas paranormales aterradoras en el interior de casas embrujadas del Cusco.


RELATO 1:
En la ciudad del Cusco, la demanda de hoteles y hospedajes cada vez es mayor, debido a la impronta turística de la ciudad.
Si bien es cierto que para el turista es una bendición el hecho de que haya una mayor oferta de posadas, lo cierto es que para los empresarios hoteleros ha aumentado la competencia en el rubro turístico.
Un hotel en particular, cuyo nombre debo reservarme, estaba quedando rezagado, hasta tal punto de declararse en quiebra por la bajísima concurrencia de huéspedes.
Es por ello que hasta que se presentara un comprador, el hotel siguió funcionando, y funcionaría hasta que alguien lo compre.
La persona que nos comparte esta singular historia decide permannecer en el anonimato, y se trata del dueño del susodicho hotel.
Si bien había escuchado algunos rumores de que se veían sombras y se escuchaban ruidos por parte de los huéspedes, nunca pudo 
confirmarlos, ya que no había experimentado ningún evento de carácter paranormal.
Es más, estaba ya harto de esas habladurías, las cuales él creía que habían sido la razón del porqué de la baja afluencia de clientes.

Una noche, él se quedó hasta bien noche cuadrando las cuentas y las deudas a pagar.
Estaba en el mostrador del lobby y miró hacia el pasillo.
Entonces, vio una silueta que se desplazaba por el lobby y saliendo al patio.
Salió a ver para decirle al huésped que no ingrese al patio, pero entonces se acordó de algo.
En el hotel no habían ningún huésped alojado.
Pero pudo haber sido algún trabajador, ¿no?.
Lo cierto es que no había trabajadores. Sólo él trabajaba allí. Le iba tan mal que no alcanzaba para pagar el sueldo de ningún trabajador. Por lo tanto, en esa noche sólo él estaba allí.
A partir de allí, comenzaría una ola de eventos paranormales.

Días después, sucedió otro suceso. Él estaba limpiando la escalera del patio. En ello, el balde con el agua salió volando, como si alguien lo hubiera pateado con fuerza e ira.
Él se retiró de allí algo avergonzado.
Entonces, los fenómenos paranormales cada vez fueron empeorando.

Sombras, siluetas, ruidos, habitaciones en donde se prenden y apagan las luces, etc.
Y tras ello, comenzaron las pesadillas, las agresiones físicas y los intentos de posesión.

Una mañana, él estaba limpiando las habitaciones. Ya había contactado con un posible comprador a quien le vendería el hotel por precio de gallina flaca. Sin importar eso, por fin iba a deshacerse de gastar en el hotel. Por lo tanto, había que entregar el hotel en perfectas condiciones para que se animen a comprarlo.
Entonces, él encontró debajo de la cama de una habitación un muñeco. Estaba pinchado con alfileres en todo el cuerpo.
No cabía duda. Era un muñeco vudú de brujería.
Sin saber cómo proceder en ese caso, fue a ver a un chamán.
Tras consultarlo con un chamán que se veía confiable, él se enteró que el muñeco era un trabajo de brujería para hacer que le vaya mal en los negocios. No tenía problemas de salud, el único problema era en el negocio del hotel.
Posiblemente, era alguien que le tenía envidia o que fuera un competidor y que lo metió debajo de la cama.
Pero, quien fue y cómo lo metió allí.
Sobre la identidad del responsable, estaba más que claro que, o bien era algún competidor en el rubro hotelero, o era alguna persona que le tuviera envidia. Pero, quién exactamente, no podía saberlo.
No podía desconfiar de nadie en concreto, ya que tampoco le iba tan bien como para despertar los celos de otros dueños hoteleros. Había mejores hoteles que el suyo.
Sobre como lo metió allí, pues era una pregunta mucho más difícil de responder, a menos que se haya hospedado allí.

Pero lo más importante era cómo romper el maleficio puesto en su hotel.
El chamán le dijo que debía quitar el muñeco del cuarto, y una vez afuera, en un sitio lejos, debía quemarlo.

Él fue al hotel, sacó al muñeco de debajo de la cama del cuarto, fue con ello afuera de la ciudad, en un descampado rural, y quemó ese muñeco, desarticulando el hechizo.
Semanas después, los eventos paranormales dejaron de suceder en esa casa, y casi a la par aumentó la cantidad de huéspedes alojados.

Como al mes de ello, aquel dueño de ese hotel se enteró que una persona conocida de él tuvo un accidente.
Había sufrido un incendio en su casa, perdiéndolo prácticamente todo.
Tal persona era un antiguo trabajador.
No digamos que fue un trabajador entrañable que trabajó tiempo allí.
Todo lo contrario.
Resulta que durante unos tres meses, había trabajado allí un señor, un trabajador con quien discutía porque lo había atrapado infraganti robándose implementos del hotel.
Este trabajador fue despedido por sus constantes hurtos, y en vez de pedir disculpa, este tipo le dijo que iría a fracasar en el hotel.
Vaya, cómo no se acordó antes.
Era él.
Fue él quien le hizo la brujería.
Ahora, muchos dirán que esto podía ser una simple y alocada conjetura.
Sin embargo, en el mundo de los daños y las brujerías, cuando un mal es descubierto y tratado, el daño se regresa a la persona que lo envió.
En este caso, al poco tiempo de que el dueño del hotel haya quitado la brujería, la casa de este ex trabajador se quemó.
Lo único que queda pendiente es cómo llegó el muñeco allí, debajo de la cama de la habitación.
Tal vez el mismo día en que fue despedido, aquel trabajador puso el muñeco vudú, justo antes de marcharse, o tal vez mandó a alagún familiar o conocido a que se hospede y coloque el muñeco.
Nadie lo sabe.

Lo único cierto es que la brujería sí existe.


RELATO 2

De la ciudad del Cusco, nacen una serie de caminos de trocha que llevan a los diferentes pueblos y caseríos.
Siguiendo por la avenida Circunvalación se llega a una pampa, un descampado, en el que se yergue una casona abandonada.
Cabe precisar que la zona está cubierta con arboledas y bosques de un vivo verde, bajo un cielo que pareciera dibujado en un lienzo, sin dudas, un paisaje idílico.
Era un caserón en U.

Una tarde, Pedro, su primo Jorge y su amigo Juan, se fueron adentrándose al campo a las afueras del Cusco.
Querían pasear y disfrutar de los alrededores.
Y es cuando, caminando por una trocha rodeada de bosquecillos, se topan con una extraña construcción.
Una casona aparentemente abandonada, construcción que nunca habían visto.
La curiosidad los jaló a meterse dentro. Total, la juventud nos incita a tomar ciertos riesgos.
Entrar dentro no fue problema.
No había puerta, así que se colaron en el interior.
Caminaron, anduvieron por entre las ruinas de aquel desolado lugar.
La casa era amplia, grandísima, extensa, lo que más parecía una galería, un laberinto.
Entonces, Pedro subió al segundo piso, pensando que Jorge y Juan estaban allí.
Sin embargo, ambos aún estaban en el piso de abajo.
Cuando Pedro estuvo ya en el segundo piso, escuchó unas voces que provenían del interior, probablemente, de una de las tantas habitaciones.
Pedro se encaminó rápidamente hacia el lugar donde escuchó las voces.
Efectivamente, provenían del interior de una habitación cuya puerta estaba cerrada.
Se acercó a empujar la puerta de dicho dormitorio, pero ni bien empujó un poco, sintió un aire frío salir del interior y golpear su cuerpo, lo cual le hizo tiritar.
Pero no fue el frío, sino que tuvo un extraño sentimiento, una sensación de que no debería entrar allí.
Sin embargo, y a pesar de que se hubiera arrepentido de entrar, su mano no se detuvo y siguió empujando la puerta, como si fuera un acto imposible de revertir.
Entonces, la puerta ya estaba abierta.
Ingresó dentro de la habitación y en una esquina estaba... algo.
No, no era porque estaba oscuro y no pudo distinguir bien.
Bueno, sí, la habitación estaba en penumbra, pero sí se podía ver.
Era un cuerpo gaseoso, algo así como una nube.
Y entonces esta masa se desparramó hacia él, quien se quedó inmóvil en el marco de la puerta, quedándose inmóvil, esperando el arribo de eso, lo cual no tardó mucho en alcanzarlo.
Jorge y Juan escucharon los gritos de Pedro en la planta de arriba.
Y aunque pensaron que podía ser una broma, se aprestaron a correr.
Había algo en el tono de los gritos que indicaba que podía ser que efectivamente estaba siendo atacado.
Al llegar se acercaron a una habitación que estaba con la puerta semiabierta, y de la que se escuchaban los gritos.
Al llegar al pie de la puerta, al ver el interior....
No lo podían creer.
Pedro estaba tirado en el suelo dentro de la habitación y sobre él estaba una silueta negra.
Entonces, ello se dio cuenta de la presencia de los dos chicos que se quedaron helados del miedo, el cual se apoderó de sus corazones.
Fue cuando eso arrastró a Pedro directo hacia la ventana. Pretendía lanzarlo hacia el exterior.
Aunque quisieron, el miedo los hizo entornillarse dentro del suelo.
Y vieron impotentes como Pedro fue lanzado por la ventana del segundo piso.
Cuando eso pasó, parecieron reaccionar y corrieron, quien sabe si para auxiliar a Pedro quien con suerte aún estaría vivo, o si fue para salir de huir.
Ambos bajaron y salieron de la casa. Se acercaron adonde Pedro.
Afortunadamente, el suelo de tierra había amortiguado la caída.
Si hubiera sido en la ciudad, no tengan duda que Pedro hubiera muerto desnucado.
Llevaron al pobre Pedro pidiendo ayuda a los comuneros. Lo llevaron al hospital, donde lo atendieron.
Pedro había sufrido rotura de clavícula y de muñeca.
Estuvo meses con rehabilitación.
Pero si bien se pudo recuperar físicamente, quedó con trauma.
Se desespera al quedarse solo en su casa, rompiendo en llanto si escucha ruidos a los que no puede encontrar una pronta explicación.

lunes, 4 de julio de 2022

Misterios Bíblicos

La Biblia esconde muchos misterios. ¿Dónde estuvo el Jardín del Edén? ¿Dónde están Sodoma Y Gomorra? ¿existieron gigantes en la tierra?.
Estos y otros misterios copan el universo bíblico, ante los cuales la comunidad científica sigue investigando y buscando respuestas.
En esta oportunidad, nos centraremos en 5 misterios bíblicos.
Si te gustó el video, hazme saber si deseas una segunda parte con más misterios de la Biblia.


El Jardín del Edén
Uno de los primeros misterios que surgen en la Biblia gira en torno al mítico Jardín del Edén.
El libro de Génesis, el primer libro de la Biblia, hace mención a una tierra maravillosa en la que vivían todos los animales de forma pacífica, viviendo también allí el primer ser humano, el primer hombre, Adán.
Tras el pecado de Adán y Eva, Dios expulsó a ambos de aquel paraíso terrenal.
Ahora bien, la ubicación exacta del Jardín del Edén ha sido una búsqueda incansable por parte de los científicos y la arqueología bíblica.
Según el libro de Génesis, este jardín se ubicaba en el medio oriente, y un río salía del Edén para regar el jardín, y desde allí se dividía, y se convertía en cuatro cabezas, llamados: río Pisón, que se dice, rodeó toda la tierra de Havila; el río Gihón, que habría rodeado toda la tierra de Cus; el río Hidekel; que iría al oriente de Asiria; y el río Éufrates.
Es cuestión de investigar donde quedan esos 4 ríos en la antigüedad.
Sin embargo, sólo es reconocible el río Eufrates, más no el Pisón, el Gihón ni el Hidekel.
¿Será acaso que no se podrá conocer el paradero de dicho paraíso?
Si bien es cierto que esos tres ríos no aparecen en los mapas, quizás el jardín del Edén no esté del todo perdido.
Para empezar, aunque nadie conoce al río Hidekel, pero sí todos han escuchado del río Tigris.
Pues bien, el río Hidekel es el río Tigris, ya que está al este de Asiria y se une en un parte baja con el río Eufrates.
Faltaría conocer los otros dos ríos.
El río Pisón rodeó toda la tierra de Havila, tierra que era conocida como Arabia, 
mientras que el río Gihón habría pasado por la tierra de Cus, la cual no es sino Etiopía.
Estos 4 ríos se unirían en la parte baja, en la actual zona del sur de Irak.
Y tras esta convergencia, nacería un río, el cual discurriría por el jardín del Edén, que estaría situada en el mar, en algún lugar del Golfo Pérsico.

El Arca de Noé
Pero el Jardín del Edén no es el único misterio del Génesis.
El arca de Noé es una embarcación de madera realizada por Noé.
Dios había planeado destruir el mundo con un diluvio, pero permitió que una pareja de todos los animales del mundo, así como Noé y su familia ingresen y se resguarden de la aniquilación.
Tras varias semanas, el arca flotó en el gigantesco mar universal, hasta que dejó de llover y el agua fue descendiendo hasta que tocó tierra firme y Noé y su familia salieron del Arca.
Pero, ¿Dónde quedó el arca?.
A diferencia del Jardín del Edén, no hay referencias del lugar donde el Arca quedó anclado.
En 1916, Vladimir Rosskowizky, un explorador ruso, aseguró haber hallado a una altitud de 4 000 msnm, en el monte Ararat, una embarcación semienterrada bajo el hielo.
Es cuando el zar Nicolás II de Rusia envió una expedición que ratificó que el hallazgo correspondía al arca y se extrajeron pruebas que se estimaron como definitivas.
Sin embargo, la Revolución Soviética y el fin del régimen zarista hicieron que dichas evidencias se perdieran para siempre.
Después de la Segunda Guerra Mundial, muchos escaladores o exploradores han señalado haber visto o hallado fragmentos del arca en las inmediaciones de la cima del monte Ararat.
Este misterio aún seguirá sin descubrirse.

Sodoma y Gomorra
Tras regresar de Egipto, Abraham el patriarca había levantado su campamento en el actual Israel, acampando afuera de las ciudades cananeas.
Es cuando los pastores de Abraham sostuvieron pleitos con los criados de su sobrino Lot por la posesión de pozos de agua, tan necesarios para sobrevivir.
Lot eligió vivir en la llanura del Jordán, mientras que Abraham habitó en la orientación contraria, al oeste.
Lot habitó en la ciudad de Sodoma, cuyos pobladores eran malvados, por lo que Dios castigó a dicha ciudad conjunta con su ciudad aliada Gomorra, destruyendo a ambas ciudades con una lluvia de fuego y azufre.
La Biblia sitúa a dichas ciudades en la llanura del Jordán, al norte del mar Salado.
Se describe como parte de una ruta comercial común y estaría protegida por torres y altas y gruesas murallas.
Ahora bien, tras décadas excavando, los arqueólogos creen que por fin han encontrado las ruinas de la ciudad bíblica de Sodoma.
Los expertos que investigan el valle del Jordán aseguran haber hallado los restos de una ciudad de la Edad del Bronce que coincide con la descripción que da el Antiguo Testamento de esta urbe.
Las razones son varias.
En primer lugar, sería la ciudad más grande de la región, tal y como se describe en la Biblia.
En segundo lugar, las fechas coinciden, ya que data de entre el 3.500 aC y el 1.540 aC.
En tercer lugar, se cree que fue abandonada repentinamente en algún punto de la Edad del Bronce.
Sin embargo, algunas declaraciones hechas por autores clásicos describen una región quemada por una catástrofe ígnea, ubicada al sur del Mar Muerto, donde se encontraban varias ciudades destruidas y cuyos restos consumidos por el fuego todavía eran visibles en sus días.
Se dice que de las fisuras del terreno emergen gases tóxicos (Dt 29:23).
Los geólogos han encontrado petróleo y gas natural en la región ubicada en los alrededores del extremo meridional del Mar Muerto, que es a la vez una zona frecuentemente sacudida por terremotos; de manera que encontramos aquí todas las condiciones necesarias para que se produjera la catástrofe que describe la Biblia.
Además, Jebel Usdum, el Monte de Sodoma, en lacosta sudoccidental del Mar Muerto, está constituido en un 50% por sal pétrea.
Se cree que durante la catástrofe que provocó la destrucción de Sodoma, parte de esta sal habría volado violentamente y cubierto a la mujer de Lot, la que así tomó la forma de una estatua o columna de sal (Gén 19:26).

El arca de la Alianza
El arca de la alianza o arca del pacto es un cofre de madera cubierto de oro descrito en relatos bíblicos que, según la tradición judía, fue diseñado y creado por mandato divino para guardar las tablas de los diez mandamientos.
El episodio se sitúa aproximadamente un año después del éxodo de Egipto.
El arca fue creada siguiendo el modelo que Dios le habría dado a Moisés cuando los israelitas acamparon al pie del monte Sinaí. 
Fue usada en la conquista de Canaán y con ella Josué consiguió abrirse paso en las aguas del Jordán al contacto de éstas con el arca, y durante siete días fue paseada en torno de Jericó, que cayó luego en poder de dicho caudillo.
El arca fue fijada en Silo.
Durante la época de Elí y Samuel, sucedió uno de los episodios más impresionantes del que se cuenta acerca del arca de Dios.
Durante una cruenta guerra contra los filisteos fue llevada al campamento israelita con el objeto de levantar la moral de los guerreros.
Pero después de una trágica derrota del pueblo hebreo, donde también murieron los dos hijos del juez y sacerdote israelita Elí, los filisteos la tomaron como un valiosísimo trofeo, dando lugar a un verdadero luto en todo el país de Israel.
En poder de aquellos estuvo unos meses, aconteciendo que desde el momento que fue llevada al templo de la gigantesca estatua del dios Dagón en Asdod, este quedó dos noches consecutivas postrado delante del arca, solo que la segunda vez decapitado y sin las manos, a lo que siguió una ola de estragos, desastres y plagas azotando todo aquel país.
Los filisteos, horrorizados por aquellos sucesos, habían dejado que el arca fuese sola en un carro tirado por dos vacas. Después los animales pararon en Bet Semes: varios habitantes de aquel lugar murieron por el trato poco reverente que dieron al objeto sagrado.
De allí fue trasladada a Gabaá.
Luego, Saúl la habría utilizado en la campaña contra los filisteos.
Posteriormente David con un acompañamiento solemne la habría trasladado a Sión.
Sin embargo, de camino a Sión había ocurrido un accidente: Uza, un encargado del arca, quiso sostenerla en un momento de bamboleo y cayó muerto de repente.
David atemorizado la dejó durante 3 meses en casa de Obed Edom.
Seguidamente, desde Sión la reliquia fue instalada en el majestuoso templo que construyó el nuevo rey, Salomón, en Jerusalén.
Siglos después, en el año 587 a.C., Nabucodonosor II, el rey de Babilonia, invadió Jerusalén, destruyendo el templo y saqueando todos los objetos valiosos del mismo.
Se cree que el arca fue llevada y colocada en un lugar seguro y secreto antes de la invasión caldea y posterior deportación de los judíos.
Según el registro de los Macabeos, Jeremías tomó el arca para ocultarla en el Monte Nebo, en la actual Jordania.
Sin embargo, esa no es la única hipótesis, ya que un grupo de rabinos afirma que tras la caída de la ciudad de Jerusalén, que devino en la destrucción y saqueo del Primer Templo a manos babilónicas, el arca habría sido enterrada en el monte Moriá, debajo del antiguo templo.
Hay algo a favor de esta creencia y es que este cofre sagrado no se menciona entre los tesoros devueltos por los persas, 

Gigantes Nefilim
Uno de los misterios más sorprendentes de la Biblia es sin duda la existencia de gigantes.
En Génesis se deja constancia que un grupo de ángeles, los ángeles caídos, descendió a la tierra y tuvo relaciones carnales con mujeres en la época antes del diluvio.
Estas uniones antinaturales y prohibidas dieron como resultado gigantes llamados Nefilim o Nephilim​, una legendaria raza de gigantes híbridos, la cual se habría extinguido posteriormente durante el diluvio universal.
Sin embargo, al parecer los nefilim habrían podido sobrevivir al diluvio.
Esto se hace evidente cuando los israelitas inician su avance conquistador por el territorio del actual Israel, país habitado por una serie de tribus como amorreos, heteos, heveos, y otros.
Moisés envió a 12 espías que explorasen toda la tierra prometida.
Tras merodear esa tierra, retornaron los espías. Diez de ellos reportaron que los pobladores de la tierra de Canaaán eran descendientes de los nefilim antediluvianos y que, en comparación, los hebreos eran como “saltamontes”.
Es allí que le dan el término de hijos de Anac, raza de los gigantes.
El sucesor de Moisés, Josué peleó varias batallas con los anaceos y los amorreos.
Finalmente, él “destruyó a los anaceos de los montes: de Hebrón, de Debir, de Anab, de todos los montes de Judá y de todos los montes de Israel; Josué los destruyó a ellos y a sus ciudades.
Principalmente, destaca Hebrón, ya que en ella fueron derrotados Ahimán, Sesai y Talmai, hijos de Anac, hijo de Arba, quien fue un hombre grande entre los anaceos.
Además de Hebrón, también figuran Og, el rey de Basán, ciudad al este del río Jordán, cuya cama de fierro era de grandes proporciones.
Precisamente, Og, rey de Basán, había quedado del resto de los gigantes, quienes son referidos como refaítas.
Fueron una antigua tribu cananea​ que vivía en las colinas de Judá y en la llanura filistea (Hebrón, Debir, Anab, Gaza, Gath, Ashdod).
Vivían en la región que más tarde ocuparon los moabitas y los amonitas; los primeros les llamaron emitas, y los segundos les llamaban zomzomeos.
Tanto moabitas como amonitas los derrotaron y los desposeyeron de su tierra, apropiándose de ella.
Probablemente, Arba, padre de los anaceos, haya sido un refaíta.

Pero sin dudas, los gigantes se evidencian aún más en el gigante más famoso de todos: Goliat.
Goliat era filisteo y era el paladín de estos frente a los israelitas en el campo de batalla.
Sin embargo, a pesar de su gran tamaño y su armadura, David lo venció.
Los filisteos no eran un pueblo cananeo, sino un pueblo invasor, al igual que los hebreos, amonitas y moabitas, aunque a diferencia de estos, los filisteos no eran semitas, sino de origen cretense.
Eran, pues, los filisteos uno de los tantos pueblos del mar.
Se cree que los Refaítas se mezclaron con ellos, por lo que acogieron ese gen del gigantismo propio de los refaítas.
Es más, Israel exterminó a los pueblos de la raza de los gigantes, sin embargo quedaron los gigantes radicados en Gaza, en Gat y en Asdod.
Es decir, los pueblos filisteos.

Fuera del texto bíblico se encontró en Egipto un registro muy interesante.
Durante la duodécima dinastía del antiguo Egipto, que data tradicionalmente del siglo XX al siglo XIX a. C., los egipcios practicaban algo similar al uso moderno de las muñecas vudú.
Un alfarero haría una figurilla de arcilla de un enemigo al que ellos temían.
La estatuilla tenía los brazos detrás de la espalda y el nombre del grupo o de sus líderes estarían escritos en ella.
A veces se usaba un tazón o bloque de arcilla para enumerar a los enemigos.
La figurilla o el tazón se rompían simbólicamente para maldecir a los enemigos para que pudieran ser derrotados.
Los arqueólogos han reconstruido muchos de estos textos de Maldición (también llamados Listas de Proscripciones), y se han encontrado algunos detalles muy interesantes sobre los anaceos.
Este es un ejemplo de un texto que los menciona:
Se debe notar que anaq (es decir, con una q en lugar de la c) es una transliteración común de la palabra hebrea para Anak, עְַנָק (Números 13:33).

Otro texto de Maldición coloca a los anaceos en la tierra de Canaán e incluso menciona la ciudad de Jerusalén.
Los antiguos egipcios también llamaron a los habitantes de la tierra de Canaán “Shasu”.
Un texto posterior titulado El oficio del escriba (c. 1250 a. C.), que se utilizó para entrenar a los escribas egipcios, habla de un paso de montaña cananeo durante una batalla pasada.
Los codos egipcios eran más largos que el codo común hebreo. A 52 cm (21”) por codo egipcio, los Shasu mencionados en esta carta habrían medido entre 2 m (6’10”) y 3 m (8’7”).
Esta descripción muestra que la medición tradicional de Goliat no es tan extravagante como muchos críticos creen.